Mi inexistencia... metafóricamente hablando

Dormí bajo la suave luz que atravesaba la ventana de aquella habitación escondida en ese edificio extraño...

y cuando desperté encontré que los rayos del sol se habían multiplicado y el día tenía un tacto afrutado. Era tan bonito...

Luego caminé por el pasillo, y sentí que por cada paso se multiplicaba mi satisfacción. Fue un gran acierto quedarme a dormir en aquel lugar, al principio me daba miedo... pero enseguida descubrí cómo el lugar era lo que yo idealizaba siempre, continuamente, y poco a poco me sentí mejor y mejor y crecí tanto que me ví capaz de regresar a mi habitual apartamento en la otra punta de la ciudad. Es irónico, porque lo lógico sería quedarme en aquél edificio si tanto me gustaba... pero no hay ninguna razón por la que quedarme, ninguna razón de peso, ajena al todo, la única razón en todo esto es que mi apartamento es precisamente eso, y que este edificio es... sólo otro edificio. Por algún motivo que desconozco o que es inexistente, y a pesar del sentimiento tan desconcertante y precioso que evocaban esas paredes, prefería mantener vivo mi lugar. Ese edificio era como un refugio dulce, quisiera volver... ¡¡es que es tan alucinante lo bien que me encuentro dentro!! pero me temo que ahora te escribo desde mi habitación de colores, junto a la ventana de la que quise tirarme y que es preciosa porque deja que el sol pase a través de ella.

Simplemente es una perspectiva cambiante y sin lógica, algún día volveré a ese refugio bonito, pero mientras tanto, redecoraré mi habitación... olvidaré pensar en cientos de refugios que actúan como un papel de colores y me hacen regresar a mi habitación y... todo pasará, y será, y volverá, y seré, y volveré, y me iré...

Pero creo que es la locura que me dejan esos edificios cometer, la que me aleja de las locuras que cometo en mi edificio, y me hacen compartir, que la vida consta de muchas dimensiones, de muchas habitaciones, con un contenido troncal, mi apartamento, y se desperspectivan y perspectivan y cambian y se alejan de todo y se unen y son, y dejan de ser y resulta ser todo un no ser que existe, algo que existe pero no es.

Y mola tanto...

...permitidme que use esta enorme metáfora para redimensionarme, es que me siento dulcemente apartada de la realidad y con ganas de compartirme con los demás... quiero decir... que estoy happy, en definitiva